La particularidad de la película radica en que se cuenta entre aquellos pocos largometrajes que han sido realizados prácticamente en su totalidad por la misma persona: el madrileño Pedro Alonso Pablos, en este caso. El mismo que en 2004 presentó, produjo y dirigió un espacio televisivo distribuido desde su propia página web en el cual entrevistó a consagrados directores y actores del mundo de la TV y el cine españoles e internacionales (como Santiago Segura, Guillermo del Toro o Keanu Reeves), a principios del 2010 inició su carrera como productor de dibujos animados, lanzando desde su productora Pliski a través de diversos portales de vídeo bajo demanda algunas miniseries como "Cuentos del Mundo" (2014) o "El lazarillo de Tormes" (2015), que se engloban dentro de un esfuerzo por adaptar al cine joyas de la literatura principalmente hispana pero también universal, con la peculiaridad de que todo su trabajo se realiza de manera sistemática solo por él mismo. En esta ocasión, Pedro Alonso Pablos ha acometido con su personal estilo la realización de su primer largometraje de animación, aplicando un procedimiento que él denomina "solo filmmaking": es decir, que él en solitario firma el guión, la dirección, la animación, la música, la edición y todas las voces de la película, excepto las femeninas.
"La Ruta de los Elefantes" cuenta la historia de un cuidador de elefantes que se aventura en un viaje hacia el lugar conocido como el "cementerio de elefantes" africano, con la ayuda de dos cazadores furtivos. Se trata de un cuento para el público infantil que pone de relieve la virtud de la prudencia, a lo largo de un viaje lleno de música que es trasladado a la pantalla casi como lo hubiera dibujado y animado un niño: con una técnica de animación que recuerda mucho al cut-out y unos dibujos muy sencillos, el joven espectador se verá trasladado a los paisajes africanos en una historia emotiva e inocente. No destaca "La Ruta de los Elefantes" por su animación, muy simple a los ojos de los adultos, basada en los bucles y la reutilización de figuras, ni por sus fondos, y tampoco desde luego por sus diálogos, pero en su sencillez se hace muy accesible al público infantil, y como mínimo para el espectador adulto tiene un interés como rara avis en el sentido que se apuntaba al principio.
A continuación se ofrece la entrevista que muy amablemente nos concedió el casi único (con permiso de Raquel Mizpah) responsable de la película, Pedro Alonso Pablos:
¿En qué momento decides dedicarte a la animación? ¿Partes de una formación autodidacta?
Siempre, desde pequeñito, me han gustado los dibujos animados, como extensión del dibujo. O sea que la cosa viene de largo. Durante mis estancias en empresas de publicidad y promoción he podido tener contacto con la realización de banners y elementos multimedia, además de que a mi paso por la facultad de Arquitectura en la UPM tuve contacto directo con programas de ordenador para hacer animaciones. Despúes de pasar por varias entrevistas en 2005, di por finalizada esa etapa y me concentré en aprender más sobre hacer dibujos animados.
¿De dónde surge tu determinación de afrontar en solitario la realización de un largometraje?
La versión oficial es que al terminar las entrevistas, en 2005, una persona me comentó que si lo que quería hacer eran dibujos animados lo mejor era que enviara una propuesta (ya sabes, algunos dibujos y un guión) a una productora. Y así lo hice. Bueno pues estamos en 2016 y todavía estoy esperando respuesta, ja ja ja. Imposible quedarme parado. Por otro lado, al ponerme a practicar, me di cuenta de que con mis conocimientos musicales y mi propia voz (que es bastante versátil, ya que no es ni muy grave ni muy aguda) podía hacer -casi- todo lo necesario para efectuar dibujos animados.
¿Qué retos te ha supuesto el desarrollo en solitario de la película?
El mayor reto es organizarse en el tiempo disponible para hacer un proyecto de una cierta envergadura, sin duda.
¿Qué ventajas te ha aportado, por otra parte?
La cohesión del filme es mayor, principalmente porque, por ponerte un ejemplo, al determinar que el protagonista iba a tener una trompeta, pues pude incluir sonidos de trompeta en la banda sonora principal, basada en una musica mía previa, que fue adaptándose al proyecto de una manera muy natural y cohesionada. Esto es algo que un director "tipo" no puede hacer.
¿Cuáles han sido tus referentes y fuentes de inspiración?
Me encanta la animación y por supuesto no puedo eludir mentar a Walt Disney y el manga. Pero ahora estoy profundizando y he visto recientemente un filme de animación de 1964 chino, basado en "El rey mono", que me ha gustado mucho, aunque todavía tengo que procesarlo.
¿A qué público está dirigida la película?
La orientación estricta es a niñas y niños de seis a nueve años. La extendida, de 4 a 12 años. He querido que los niños tengan temas en los que reflexionar, si bien en un entorno seguro como es un filme bonito y respetuoso. Filmin, la página desde donde se exhibe, ha corroborado esta visión.
Si bien el largometraje tiene un estilo cut-out, ha sido realizado digitalmente ¿Cómo es tu proceso de producción? ¿Qué herramientas y programas has utilizado para realizar la película?
Para este filme he utilizado un lápiz digital y un software de creación de imágenes que posteriormente ha sido ensamblado en un software de animación 2D. Todas estas herramientas son muy conocidas. Pero estoy aprendiendo nuevas, como por ejemplo el software revolucionario de código abierto (es decir, gratuito), Blender, que permite hacer 3D, 2D, edición de vídeo y videojuegos, todo en uno (aunque la curva de aprendizaje es como un acantilado, ja ja).
¿Qué presupuesto y cuánto tiempo has invertido en la realización de la película?
El presupuesto es muy reducido, ya que yo no he cobrado nada por hacerla directamente. La idea para el tema musical la tenía desde hace un par de años, pero todo el proceso ha comenzado a principios de este año. Primero suelo fijar el sonido y la música, que me da el tempo del filme, y después añado las animaciones. Esto es a la inversa de cómo se hacen las cosas actualmente pero hay que resaltar que trabajo solo y me resulta más fácil hacerlo así. Como cosa curiosa te comento que este filme no tiene guión, ya que he ido improvisando escena por escena. Las voces femeninas las grabé yo primero y luego fueron sustituidas por las de mi amiga Rachel Mizpah, que tiene una voz preciosa.
¿Planeas en el futuro realizar un largometraje con un equipo más amplio?
Estoy creando una división dentro de mi estructura para proponer creaciones más ambiciosas como series de largo metraje o similares a terceras empresas, pero esto es complicado. Un filme es algo muy caro (la media por aquí es de un millón y medio de euros de presupuesto por largometraje) por lo que convencer a una empresa para llevar adelante un proyecto no es fácil. Pero lo seguiré intentando. Mientras, continúo con lo mío también. Voy a incluir partes en 3D en algunos de mis próximos filmes, si el proyecto lo requiere.
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