Tan solo un día antes de la ceremonia de los Premios Goya se estrena esta película que pese a optar a la estatuilla al mejor largometraje de animación es la demostración de que lograr la nominación no es sinónimo de obtener distribución en un suficiente número de cines. Una lástima, puesto que "Teresa y Tim" es una película especialmente recomendable para el público infantil, que encontrará en ella un profundo mensaje sobre la amistad, y recibió una buena acogida en los festivales de San Sebastián, Sevilla y Logroño.
Producida por la compañía vasca Dibulitoon Studio y dirigida como debutante por la autora de la colección de libros homónimos, Agurtzane Intxaurraga, sobre un guión desarrollado por Juan Luis Carreras, la película articula su historia en torno a un duende aventurero llamado Tim que acaba atrapado por un malvado feriante para ser explotado como una atracción de circo y una niña de 6 años - Teresa - que lo rescatará accidentalmente de su cautiverio y lo conducirá a su casa; ambos se sentirán identificados el uno con el otro y pronto se desarrollará entre ellos una estrecha amistad que acabará viéndose amenazada por la codicia del feriante, que quiere hacerse con Tim cueste lo que cueste, y por la acuciante necesidad de que Tim vuelva a su mundo.
"Teresa y Tim" plantea una inocente aventura llena de emotividad, diversión y suspense en la que el joven público se verá reflejado en esas ganas de reír, jugar y pasarlo bien que todo niño y niña llevan dentro, al tiempo que reconocerá la responsabilidad que conlleva la amistad, todo ello contado con un lenguaje cercano y actual que busca la identificación con el espectador. Éste se encontrará además con unos personajes 'humanizados', con los matices, bondades y defectos de cualquier persona corriente, y alejados de los héroes de fantasía de la animación tradicional, complejidad que en todo caso no comparte el malo maloso de la película.
Gráficamente el largometraje presenta un diseño muy atractivo para el público infantil, con colores muy saturados y personajes de líneas sencillas, que tiene el acierto de trasladar a la pantalla del cine las ilustraciones de un cuento. Desde este punto de vista son más excusables las evidentes limitaciones en iluminación y texturas, que quizás se deriven de lo ajustado del presupuesto de la película.
Se agradece en todo caso que desde el punto de vista de la animación se haya dado suficiente importancia al acting y a la expresión corporal de los personajes, y que los movimientos se enriquezcan con acciones secundarias y la debida atención a los personajes de fondo. Como contrapunto se observa también una mínima interacción con los elementos de background, notablemente visible en la vegetación, en lo que responde seguramente a una decisión basada en las limitaciones presupuestarias, pero que aleja a la película de los niveles de detalle a los que nos tiene acostumbrados Hollywood.
Lo mejor: el corazón de esta película que profundiza en la magia de la amistad a bordo de una aventura divertida y vibrante contada con un lenguaje cercano.
En contra: las limitaciones gráficas y de integración con los fondos la sitúan por debajo del nivel general de las películas en 3D, y evidencian que hubiera quedado mucho mejor como una película en 2D.
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