No es el único clásico animado de Disney que se va a llevar a imagen real; la casa de las ideas ha emprendido una marcha imparable hacia las versiones reales de sus clásicos que se ha extendido sobre "El Libro de la Jungla" (dirigida por Jon Favreu, la nueva versión se estrenará en octubre de este año y estará protagonizada por Neel Sethi - Mowgli -, Bill Murray - Baloo - , Ben Kingsley - Bagheera -, Idris Elba - Shere Khan -, Lupita Nyong'o, Scarlett Johnson, Christopher Walken..), "Pedro y el Dragón Elliott" (a estrenar en 2016 con Bryce Dallas Howard, Robert Redford, Wes Bentley, Karl Urban, y Oakes Fegley como Pedro), "La Bella y la Bestia" (cuya nueva versión, prevista para marzo de 2017, dirigirá Bill Condon - Crepúsculo - contando con los actores Emma Watson - Bella -, Dan Stevens - Bestia -, Luke Evans - Gaston -, Josh Gad - LeFou - y Emma Thompson - Mrs.Potts) y "Dumbo" (para cuya adaptación se cuenta con Tim Burton a la dirección). Y eso no es todo, puesto que también tendremos revisitaciones en imagen real de "La Sirenita" y "101 Dálmatas" (de la que ya hubo dos adaptaciones en imagen real protagonizadas por Glenn Close en 1996 y 2000).
Como vemos, uno de los valores principales de todas estas revisitaciones radica en que las películas van a estar protagonizadas por grandes y archiconocidas estrellas de Hollywood, mientras que el trabajo en guión es mínimo: las tramas son practicamente idénticas a las de las películas originales, e incluso en algunos casos se repiten temas musicales. Es una forma de ganar nuevos espectadores sin tener que esforzarse en tiempo y en coste en forjar un buen guión original. Con estas nuevas versiones, Disney busca capitalizar en taquilla aquellas películas que forman parte de su panteón, cintas de hasta 80 años que la compañía suele editar y sacar a la venta a precio de oro cada cierto tiempo en DVD o Blu-Ray, pero que ahora que internet ha hecho más prescindibles estos formatos necesitan nuevas salidas.
Las versiones en imagen real ofrecen a Disney una salida más o menos segura, teniendo en cuenta los éxitos de "Maléfica" (de 2014, con Angelina Jolie en el papel protagonista), inspirada en el cuento de la Bella Durmiente, o de la "Alicia en el País de las Maravillas" (2010) de Tim Burton y "Encantada" (2007), que a pesar de no recibir abundancia de buenas críticas, sí engrosaron las arcas de Disney. Estas películas incorporan cierto enfoque más adulto y suficiente acción para superar el encasillamiento de entretenimiento infantil sin dejar del todo ese territorio; conservando el espíritu y hasta el tratamiento argumental de base de las películas originales - en un planteamiento de que lo viejo es nuevo - y acompañándose por una banda sonora popular, Disney consigue fácilmente llegar a los más jovenes e incluso a sus padres y madres, que crecieron con los clásicos de Disney y tienen una cierta añoranza y cierta curiosidad por ver de nuevo a los personajes de su infancia.
Ahora bien, por mucho éxito que seguramente puedan tener las nuevas películas, hay ciertos aspectos que pueden chirriar: básicamente, muchas de las películas revisitadas se basan en historias simples que funcionaron muy bien en animación, pero pueden quedar pobres en un planteamiento de imagen real; y por otra parte, los cuentos que Disney está versionando en sus películas de imagen real plantean muchos elementos fantásticos, y aunque el estado de desarrollo actual de las imágenes generadas por ordenador no plantea demasiadas dificultades a la hora de trasladar esos elementos a una película de imagen real, los largometrajes van a depender de una sobreabundancia de cgi que, según como esté planteado, puede casar mal con el realismo de la película (como ya se está criticando en referencia a la nueva Cenicienta) y en general puede ser un trago difícil para el espectador adolescente o adulto: uno puede aceptar bien que una taza o una pantera hablen en una película de animación, pero es más difícil proponerlo seriamente en una película con aires de realidad. De hecho, ya en 2010 los estudios plantearon una película fantástica titulada "El Aprendiz de Brujo", basada en la famosa historia de "Fantasia", que fracasó estrepitosamente porque no estaba claro si estaba dirigida a niños o a adolescentes, y Disney ha cometido similares errores anteriormente, incluso con películas de animación (como Atlantis o Treasure Planet).
Sea cual sea el éxito o no de las nuevas producciones, lo que se constata en todo caso es que Disney está dejando de confiar exclusivamente en la animación - el formato sobre el que fue durante mucho tiempo el rey a la hora de contar los cuentos e historias clásicas que conforman la mayor parte de sus películas animadas - para ganar nuevas audiencias. Y si Disney ya había dejado de confiar en la animación tradicional, con esta práctica la animación en general, tradicional o 3D, pierde terreno.
En cualquier caso, no van a ser las de Disney las únicas películas animadas que van a tener su versión en imagen real en el futuro más inmediato. También se ha sabido que Metro Goldwyn Mayer ha readquirido los derechos de la novela de Robert C. O'Brien "Mrs.Frisby & The Rats of NIMH", con cuya adaptación debutó Don Bluth dirigiendo su película de animación - precisamente distribuida por MGM - "The Secret of NIMH" (1982), para hacer una película de imagen real/cgi. La nueva película será desarrollada por Michael Berg (La Edad de Hielo) y producida por Daniel Bobker y Ehren Kruger, en torno a un ratón que se hace amigo de unas ratas de laboratorio del que escaparán valiéndose de su desarrollada hiper-inteligencia.
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| The Secret of NIMH, de Don Bluth |
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